viernes, 25 de noviembre de 2011

Saber perder - Grandioso David Trueba en esta espectacular historia de historias

Autor: David Trueba
Editorial: Anagrama
Año edición: 2009
Num. páginas: 520

Premio de la Crítica de Narrativa Castellana 2008


Sinopsis

Un matrimonio de ancianos. Otro matrimonio, roto. Una hija, Sylvia, de 16 años. Son tres generaciones más un joven futbolista argentino. Estas son los cuatro ejes a través de los cuales gira la historia. Una historia de historias.

Aurora se ha roto la cadera. Esto la deja incapacitada por un tiempo. Su marido, Leandro, pasados los 70 años, no sabe hacer frente a esta situación que le sobrepasa con creces. Viejo e impotente, Leandro hace balance de su vida pasada, y el resultado no es lo positivo que le hubiera gustado. Desesperado por las expectativas nunca cumplidas, por el conformismo, el buen comportarse, se ve inmerso en una crisis existencial que, con unas pésimas habilidades para gestionarla, le arrastra como  lo hace el fuerte oleaje hacia las profundidades del mar.

Lorenzo intenta superar un matrimonio roto, el abandono de su mujer y el fracaso laboral. Atormentado por el grave delito que cometió impulsado por el odio, intenta rehacer su vida en todos los sentidos. Daniela, una niñera ecuatoriana que trabaja para los vecinos del piso de arriba, quizá le ayude en estos incerteros momentos.

Sylvia y Ariel son jóvenes y guapos. Ariel es argentino, guapo, tranquilo, casi 20 años, jugador de fútbol. Acaba de fichar por un prestigioso equipo español. Es famoso y tiene que andar con cuidado con lo que hace si no quiere salir en las portadas de las revistas. Sylvia en cambio, es lo que comúnmente se denomina anónima. Es una palabra muy fea para designar a todos aquellos por los que las revistas sensacionalistas no tienen ni el más mínimo interés. Sylvia es una chica normal, lista y madura, aunque de 16 años. Acude al insitituto cada día y tiene una amiga y un amigo de un curso superior.

Estos son los cuatro personajes que David Trueba nos presenta para componer mediante diferentes pedazos de historias, su historia: Saber perder. Compone además esta gran obra con gran agudeza y habilidad para estructurar y gestionar la historia con total carencia de una lienalidad, utilizando flashbacks, retomando una historia en el punto justo en la que la había interrumpido capítulos antes, o explicando un mismo acontecimiento en momentos diferentes bajo la perspectiva de diferentes personajes implicados en éste. Todo ello, y es lo interesante a destacar, lo hace confiriéndole la sensación de naturalidad estructural y orden a la historia. De esta manera el lector no es sólo capaza de leer la obra sin ningún tipo de dificultad, sino que además ayuda a que cada acción, pensamiento y sentimiento sea comprendido con exactitud.

Se podría decir que Saber perder es la moraleja, la interpretación que se extrae de una lectura entre líneas. Perder forma tan parte de la vida como el ganar y debemos de estar preparados para ambos fenómenos y ser capaces de aprender de ellos. Debemos sentirnos merecedores del ganar, disfrutarlo siempre con los pies bien pegados al suelo. Pero también debemos asumir las pérdidas, las incapacidades, las limitaciones; intentar superarlas y aprender de ellas. Quizá la felicidad no dependa tanto de ganar, sino de Saber perder.

1 comentario:

  1. Quizá la felicidad no dependa tanto de ganar, sino de Saber perder. <-- Secundo, muy bien escrito, no esperaba menos ;-)

    ResponderEliminar