Editorial: Anagrama
Año edición: 2010
Num. páginas: 152
Sinopsis
La tensión de la adolescencia de Tomás llega a un punto de no retorno cuando viaja con su familia, como todos los años, al pequeño pueblo de veraneo en el que suelen pasar las vacaciones. Bajo la inactividad veraniega todo empieza a suceder de pronto: el descubrimiento del sexo y de la violencia, la muerte, la trasgresión… Tomás se descubre a fogonazos, como si no pudiera evitar que su inteligencia fuese un paso por detrás de sus acciones, hasta que la dinámica de las cosas le lleva a participar en un acto que no puede perdonarse a sí mismo. Es entonces cuando se siente obligado a sentarse frente a la única persona que le puede juzgar y perdonar.
Es un relato violento, dotado de un realismo extremo y caracterizado por la complejidad psicológica de Tomás, el adolescente protagonista de la historia. Andrés Barba consigue plasmar la turbulenta etapa de la adolescencia, y la particular vivencia del protagonista más concretamente, con una capacidad literaria extraordinaria y que denota ser cosa innata y natural en él. Andrés Barba me parece un provocador de una sensibilidad atroz, capaz de incomodar escarbando en la más profunda naturaleza humana, sacando a la luz los tabúes más evidentes.
Es un relato violento, dotado de un realismo extremo y caracterizado por la complejidad psicológica de Tomás, el adolescente protagonista de la historia. Andrés Barba consigue plasmar la turbulenta etapa de la adolescencia, y la particular vivencia del protagonista más concretamente, con una capacidad literaria extraordinaria y que denota ser cosa innata y natural en él. Andrés Barba me parece un provocador de una sensibilidad atroz, capaz de incomodar escarbando en la más profunda naturaleza humana, sacando a la luz los tabúes más evidentes.
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| Andrés Barba - Fotografía de Santiago Barba |
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